De la voz ronca y la medialuna

He concluido con cierta pena para el día de hoy, que la vida no te permite ser o hacer del todo como quisieras, pues los ritmos y las danzas no te hacen tan libre ni tan ajeno como sueles pensar la mayoría del tiempo que eres.



Ya no camino como antes, y eso me jode.



Mis planes para hoy incluían una visita nocturna al mejor estilo de superheroe sesentero (con serie de TV, por supuesto), y que ahora se que definitivamente nunca llevaré a cabo... si pues, a la larga la ruleta es eso, una cosa que gira, que empieza donde no sabes y acaba donde menos te imaginas... ahi, bajo tus pies, siempre ahi... y uno queda mal como siempre, porque nunca sabe, porque nunca supo.


Que dios me obsequie dias geniales que no he podido planificar ni un poco, es una cuestión que me hace sentir confusa porque ya forma parte de mi rutina interna, y por ahi surgen las preguntas de toda la vida... sera que algún día aprenderé???... o será que seguiré mirandome los pies cual orate???


No soplen, no hace falta.



El invierno no sabe de mis lineas torcidas, posiblemente porque no sabe como llegar hasta aqui... y si bien se que habrá un día para todo, como lo hay para perder el tiempo en esto... me pregunto que dirá cuando sepa que le llamo asi y no de otro modo.



Y es no se como explicarlo...


Creo que te imagino asi...



Como una casita de madera que corona un monte no muy alto, escondido casi todo bajo aquella palida que sigue cayendo... con una chimenea a medio apagar y una copa de vino sobre la mesa... ya sabes, por si la visita llega.

Como la casita de la bruja mala del cuento... que cuando no tiene nada que hacer escribe tonterias y las publica esperando que el tiempo solo se haya alejado un poco, solo lo suficiente...


Esperando que le quede bastante para buscar mas leña...


Para servir mas vino y devorar algún día la otra mitad de la luna...


Para volar en la escoba que siempre apunta al norte...